OH poderoso San Deshacedor, señor justiciero que
controlas la maldad y la codicia, te hago esta ofrenda. Hoy vengo humilde hacia
ti a pedirte permiso, permiso para que según yo vire esta ofrenda que tengo en
la mano, así se vire a mis enemigos lo malo que me están haciendo, sean hombres
o mujeres
San Deshacedor, glorioso héroe contra el mal y la
injusticia, deshace en mi casa todo mal que en ella se encuentre, y en bien
convirtiéndolo; que a todo el que pretenda disponer de algo de mi persona, se
le deshaga esta idea y quede arrepentido. San deshacedor, santo de gran
poderío, de igual manera como doy la vuelta a esta ofrenda, da la vuelta a todo
lo malo que venga y se cumpla mi petición.
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