San Luis Beltrán fue un fraile del siglo XVI, confesor,
misionero y predicador de la orden de Santo Domingo.
También conocido como “Beltrán santo milagroso”, fue una
persona de continua oración y muy humilde; de profunda fe siempre destacó por
ser paciente y caritativo.
Dios le concedió el don de lenguas (aunque solo hablaba
español, y sin estudios, previos conocía y platicaba multitud de dialectos e
idiomas), así como el don de la profecía y el don de obrar innumerables prodigios
y milagros.
Gran predicador y misionero modelo y entregado, siempre tuvo
muchísima confianza en Cristo Crucificado y gran devoción por la Virgen María,
y a Ellos se encomendaba con verdadera esperanza en los peores momentos.
Solía hacer durísimas penitencias como ofrecimiento para la
salvación de las almas y para alejar las continuas tentaciones del demonio que
padeció durante su vida.
Se le invoca para protección contra males, daños y peligros
y la sanación de enfermedades y dolencias.
Su festividad se celebra el 9 de Octubre.
ENSALMO DE SAN LUIS BELTRÁN
Criatura de Dios, yo te conjuro y bendigo
en el nombre de la Santísima Trinidad
Padre +, Hijo + y Espíritu Santo +,
tres Personas y una esencia verdadera,
y de la Virgen María, Nuestra Señora,
concebida sin mancha del pecado original.
Virgen antes del parto +
en el parto +
y después del parto +
y por la gloriosa Santa Gertrudis
tú querida y regalada esposa,
por las once mil Vírgenes, el señor San José,
San Roque y San Sebastián
y por todos los Santos y Santas
de tu corte Celestial.
Por tu gloriosísima Encarnación +
Gloriosísimo Nacimiento +
Santísima Pasión +
Gloriosísima Resurrección + y Ascensión +.
Por tan altos y Santísimos misterios
que creo y con verdad,
suplico a tu Divina Majestad,
poniendo por intercesora
a tu Santísima Madre abogada nuestra,
libres, sanes a esta afligida criatura
de esta enfermedad, mal de ojos,
dolor, accidente, calentura
y otro cualquier daño, herida o enfermedad.
Amen Jesús. +
No mirando a la indigna persona +
que refiere tan Sacrosantos misterios,
con tan buena fe te suplico Señor,
para honra tuya y devoción de los presentes,
te sirvas por tu piedad y misericordia
de sanar y librar de esta herida, llaga,
dolor, tumor, enfermedad,
quitándola de esta parte y lugar.
Y no permita tu Divina Majestad,
le sobrevengan accidente,
corrupción, ni daño,
dándole salud para que con ello te sirva
y cumpla tu Santísima Voluntad.
Amen Jesús +
Yo te conjuro y ensalmo,
y Jesucristo Nuestro señor y Redentor;
te sane, bendiga
y haga en todo su Divina Voluntad.
Amén Jesús.
CONSUMATUM EST +
CONSUMATUM EST +
Amén Jesús. Amén Jesús. Amén Jesús.
Esta Oración se debe decir utilizando un trocito de palma o
romero bendecidos, o rociados con agua bendita.
Cada vez que en el texto hay una + se hace una cruz en la
frente de la persona que se está ensalmando
y otra en la zona de su dolencia.
También es muy efectiva para bendecir a niños y personas que
se crea tienen mal de ojo u otro mal enviado.
Se puede quemar incienso y pasar el humo
por uno mismo o por la persona afectada,
y encender una vela blanca, o azul oscuro, o marrón.
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