Reina de las Sirenas que proteges
la flora y fauna marina, guía de los marineros, navegantes y pescadores y de
aquellos que están perdidos en el mar de la existencia, que también atiendes a
los humildes, los sencillos de corazón, los débiles, los ignorantes y a los que
se desviaron de la ruta correcta con sus incertidumbres morales y evangélicos, navegando
en las olas de tormenta sin discernir el refugio seguro de la perfección
espiritual.
Señora de los Océanos, símbolo de
la fertilidad, la procreación y el principio fundamental surgió en sus aguas, ya
sea la imagen de la pureza fructífera a seguir por los que se mueren de hambre en
busca de ayuda espiritual, sed de justicia y de los necesitados de caridad, creando
en la mente y la conciencia de nuestros hermanos de condición la fuente para alcanzar
los mundos superiores, integrándolos en el conjunto que es Zambi, Olorún,
Jehová, Dios, la Conciencia Cósmica o cualquier
otro nombre que le dan, y podamos convertirnos todos en iguales porque somos así, a pesar de las apariencias.
Orisha de los mares,
representante de las emociones, la reproducción y la restauración, que como ya
creían nuestros antepasados africanos,
controlas las emociones de nuestras autoridades, políticos, líderes de grupos
religiosos, iluminando sus mentes y corazones para producir ideas y negocios
saludables a fin de aliviar el sufrimiento de miles de criaturas, derrama tu
gracia todos los días en nuestras tiendas, patios, ilés y templos, llevándote
la pesada carga de angustia, ansiedad, desesperación,
enfermedad física y psicológica, emociones desequilibradas, debida a las
dificultades en la lucha por la supervivencia o las situaciones difíciles de
atravesar, el sufrimiento, derrotas y retrocesos, en busca de empleo, o de los
que sufren por otras situaciones que imponen sufrimiento moral y psicológico.
Diosa de las Aguas, junto con tu
corte de sirenas, ninfas, ondinas, y
espíritus del mar, lava las impurezas de la mente de aquellos que, lejos de las
nobles enseñanzas de los sabios, guiados por el instinto animal, hacen el mal ayúdalos
a purificar sus sentimientos, y a tomar
conciencia de que todos somos células del mismo organismo social, humano y
divino, y que mientras que hay una célula enferma, todo el cuerpo está enfermo.
Madre Universal, danos a todos los
mismos ideales y sentimientos de fraternidad, de unidad y de comprensión. En las playas te rendiremos homenaje, con respeto, cariño y atención y,
sobre todo, con la esperanza en un futuro mejor para la humanidad, sin dolor,
odio o resentimiento, sino con amor, una sola semilla puede producir buen
fruto.
Concédenos Madre, las peticiones
que te hacemos ahora (hacer la petición) Y que nos ayudaran a caminar en este
mundo más libre de ataduras y problemas y con felicidad hacia un futuro mejor.